¡Que gustazo me acabo de dar en el blog de esta semana! Visitamos el inspirador espacio de Olga Romero Meditazen para entrevistar a una figura del sector que me causa una profunda admiración: Amanda, mentora de compradores y cabeza visible de ‘En casa de Amanda’, un consolidado espacio dedicado 100% al asesoramiento de aquellas personas próximas a adquirir, en la mayoría de los casos, su primer vivienda. Talentosa, generosa y activa, Amanda es toda una referencia del sector. ¡Gracias por esta charla tan enriquecedora!.

Amanda nos revela como comenzó su pasión por la profesión. “Soy la loca de las casas. Con la mayoría de edad tenía una obsesión por visitar todas las casas del planeta. Estudié comunicación audiovisual. Tomé la decisión de hacer turismo inmobiliario. A los 21 años me fui de casa de mis padres. A partir de ahí cambiaba de casa cada años, empecé a probar todas”, sostiene. Mientras la gente estaba en el Tuenti o Facebook, Amanda estaba full time con los portales inmobiliarios. Ahí nace su vocación de decir de ayudar a otras personas y ser consciente que cada casa tiene una historia.

Target 100% identificado

Amanda lo tiene súper claro. “Yo me dedico al comprador por una cuestión de empatía. En España no están lo suficientemente representados, van con los ojos semi vendados. Saben a lo que se enfrentan pero no saben lo que es un proceso de compra-venta. Es un combo explosivo, con muchas emociones a veces poco controladas. Tienen incertidumbres. Yo les guío durante todo el proceso para que los miedos no influyan en la decisión”, afirma.

Emprendedora por naturaleza, Amanda forma parte activa de varios proyectos. Actualmente centra mucho de su tiempo en dos ramas: un programa formativo teórico-práctico y su servicio de personal shopper inmobiliario. A eso hay que añadirle un proyecto de marketing para inmobiliarios que verá la luz próximamente. «El sector inmobiliario en redes son polilla. Hablen constantemente de ellos. El consumidor quiere que tú hables de él, de lo que le preocupa. Nace de analizar al consumidor y de llegar a la conclusión de que vamos a echarle un cable. Dignificar la imagen del sector y de que el asesor inmobiliario esté presente de una manera coherente, adaptada a los años que estamos”, reconoce.

Aunque no lleve tacones, Amanda merece el mayor de mis respetos. Se lo ha ganado todo a base de creatividad y talento: “Yo me como el mundo en calcetines porque trabajo mucho desde mi casa. Me encanta ir descalza. Cuando voy descalza es cuando siento que estoy en mi salsa”. ¡Muchas gracias por tiempo, Amanda! La próxima nos vemos en algún sitio con un buen plato de comida y una rica copa de vino.

Podéis encontrar a Amanda en:

En casa de Amanda

Inmobiliarios Anónimos